Como la vida misma

El día a día de muchas personas es pasar de puntillas por lo suyo y detenerse en lo de los demás, incluso dañando creen que hacen un bien, no distinguen entre bien y mal, sobre todo, cuando hacen de las suyas.



Es dramático ver a diario cómo caen nuestras libertades en beneficio de los poderosos, cómo nos intentan manipular para obtener de nosotros una respuesta automática sobre la base de la información y educación que nos dan.

Terrible es comprobar que incluso hay personas que obvian todo rasgo de humanidad, para defender al que pisa y manipula, que coge cualquier cosa como suya, como animales deshumanizados que son, dicen lo que sea para proteger su total ignorancia sobre lo humano y anteponen su libertad corrupta a las libertades de los demás.

Cuesta creer que haya personas así en el planeta, pero norma del transcurrir de nuestros días, parece que el dinero logra hacer que olvidemos, olvidamos tanto que un día nos damos cuenta que por nuestros privilegios muere gente, en otros países, en otras ciudades, incluso en las nuestras, en nuestras puertas, pero muertos y humanos son, muertos por el beneficio de multinacionales e intereses económico-políticos, que terminan siendo económicos sólo, un drama autentico.

De nuevo en la tierra, en nuestro mundo, en ese mundo tan diferente incluso en el mismo sitio, dependiendo del lugar en el que nazcas, dependiendo de la casta a la que pertenezcas, dependiendo del valor de tu linaje o color de piel tendrás una vida u otra, dependiendo de tu statu tendrás más limbo u infierno, teniendo en cuenta que estará en el mismo sitio, no importará el lugar, solamente tu statu.

Algunos se preguntan el por qué de nuestras desgracias, otros las sufren desgraciada y simplemente, otros inhumanos las provocan y extienden,  pero mientras otros sufren y muchos desgraciados mueren, todos tomamos partido.

Sobre todo aquellos que nublan su vista y quedan sordos, todos aquellos que anteponen el dinero a las personas, todos los que hacen de este mundo un infierno, por satisfacer su vida con dinero, dinero ganado en muchos casos por sus falsedades y mentiras, por su avaricia y descaro ante la vida de los demás, claro.

Una vez más quedamos detenidos en el camino, los intereses políticos son importantes en las manipulaciones en los medios, los medios están manipulados, unos mucho más que otros, pero manipulados, sobre todo se nota por lo aniñados que son los manipuladores, por lo faltos que son, por lo inútiles e incorrectas de sus supuestas noticias, pero sobre todo por estar controlando y escribiendo y manipulando lo que otros escriben, para manipular al público que lee, dicho en plata, no dejan que los demás hagan o decidan, ya hacen y deciden estas supuestas personas  por ellos, por nosotros.

Una lastima, sobre todo cuando estas mismas personas dicen que son libres, que les gusta la libertad y que cualquiera es libre.

La realidad es su mentira al descubierto, una mentira que apesta cada día más, una mentira que cruza el atlántico, una mentira global, una lastima con tintes de podredumbre y miseria, mezclado con un caro y pestilente perfume francés, una mentira gigantesca para producir y obtener muñecos humanos, cuentos de cuna para elaborar y cosechar personas dormidas.