Querían los españoles descubrir la realidad, pero un tal Barcenas que era "el malo", hacía de figura rocambolesca, entreteniendo a la audiencia con su grandilocuencia, teniendo en cuenta que al parecer en España
pasamos de banco Valencia a la CAM, bankia, robo de jubilados, que
después se les bajó la pensión y se les incrementó el precio a su consumo de la
sanidad.
Algunos caraduras incluso decían que la sanidad era gratuita,
mientras generaciones de españoles pagaron la sanidad, los hospitales
,los médicos , las enfermeras, la limpieza y las máquinas y las reformas
que había en la sanidad. Y sus ministros y ministerios.
Hicieron de la educación una burla, que
mentira tras mentira quedó como ya venían algunos avisando, desde hace
décadas. Al parecer no importa que millones de personas estén en paro,
porque beneficia sin duda el nuevo tipo de contrato.
Trabajadores
totalmente dependientes por décadas, personas que tendrían que mantener
familias que sin escrúpulos hacían la vista gorda mientras veían cómo se
cometían atrocidades, pero claro, lo hacían por mantener una mierda de
puesto de trabajo, pero sobre todo para pagar las facturas que protegen a la familia.
La justicia,
desde hace más de 40 años se ha dedicado a tener firmes las cadenas, que
la economía nos imponía, porque desde Europa, la fascista, se había
redescubierto un nuevo método de tener encadenadas a las personas durante
siglos. Endeudar continentes se ha convertido en arruinar países, porque
el que arruina un país tendrá tierras y siervos de por vida, mientras tanto, los ciudadanos preocupados por un
tal barcenas, no saben qué decir a haber perdido la dignidad.
Queda
claro que pueden robar ancianos, ocultar el robo de recién nacidos,
cambiar gobiernos, quitar la sanidad a los ciudadanos de un país mientras pagan el triple, perjudicar totalmente
la educación, mantener bancos en pérdidas que paga el estado, mientras
los que salen beneficiados económicamente de haber perjudicado y
perjudicar y que perjudicará, siguen tranquilamente disfrutando de su
impunidad.
No hay indicios de delito. No van a contar más que mentiras,
engaños, cortinas de humo y banalidades superfluas, que hacen que el
auténtico problema se diluya. Ya nos han quitado la sanidad, la
educación, los servicios sociales, los derechos. Ya han terminado de
repartir sus beneficios. Ya ocultan los tribunales que la verdad, no la
conoceremos nunca, siempre que tengan poder para ocultar, mentir,
engañar y públicamente.
Paga el "pueblo"...
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